ES2277153T3 - Guarnicion de cardas de acero para rodillos y/o tambores de cardas o maquinas de cardar. - Google Patents

Abstract

Una carda con una velocidad circunferencial de tambor > 1500m/min y una guarnición de cardas de acero de tambor con una altura total de 3 mm y una anchura de ala de 0,7 mm, donde los dientes presentan un ángulo de ataque (alfa) mayor o igual a 0º, caracterizado porque los dientes presentan un ángulo de addendum (beta) que es mayor de 85º, preferiblemente mayor de 87º, donde la longitud (L) de la superficie de la cabeza del diente, que se extiende con este ángulo desde la punta del diente (5) hasta el dorso del diente (7), se corresponde con al menos un 15% de la longitud del paso entre los dientes.

Description

Guarnición de cardas de acero para rodillos y/o tambores de cardas o máquinas de cardar.

La invención se refiere a guarniciones de cardas de acero para rodillos y/o tambores de limpiadores, cardas o máquinas de cardar, cuyos rodillos o tambores presentan una mayor velocidad circunferencial que los correspondientes rodillos colocados en el sentido de las fibras, donde la guarnición de cardas de acero comprende dientes con un ángulo de ataque positivo de \geq0º, véase el documento 3B-EP1099783.

En los rodillos a los que se refiere este documento se incluyen, por ejemplo, rodillos quebrantadores, rodillos descargadores o rodillos de transferencia en cardas o máquinas de cardar, y el tambor de una carda o de una máquina de cardar. Estos rodillos o tambores recogen de forma activa el material textil en bruto con el canto delantero del ángulo de ataque de los dientes de la correspondiente guarnición de cardas de acero.

El problema de estas guarniciones de cardas, es que se necesitan ángulos de ataque positivos para garantizar una buena recogida de fibras. Sin embargo, por ello, la punta del diente tiende a adelgazar, lo que hace que estas guarniciones de cardas sean más delicadas durante el montaje y también durante el reafilado. Además, se pueden ensartar de forma más sencilla impurezas o suciedades en el material textil en bruto.

Por lo tanto, la invención tiene el objetivo de poner a disposición una guarnición de cardas de acero del tipo que se ha mencionado al principio, que elimine las desventajas que se observan en la técnica antecedente, manteniendo unas buenas características de recogida.

Este problema se resuelve con una guarnición de cardas de acero del tipo que se ha mencionado al principio, porque los dientes comprenden un ángulo de addendum que es >85º, preferiblemente >87º, donde la longitud de la superficie de la cabeza del diente que se extiende con ese ángulo desde la punta del diente hasta el dorso del diente se corresponde con al menos un 15% de la longitud del paso entre los dientes.

Las ventajas que se producen por esta forma de los dientes son que, por un lado, se impide un fallo de las guarniciones de cardas, y que aunque la guarnición de cardas presenta, al igual que antes, la necesaria agresividad o actividad para el cardado, actúa de forma roma frente a las impurezas. Además, los dientes de la guarnición de cardas de acero son más estables, y menos delicados durante el montaje y durante el reafilado. Además de esto, se evita en materiales textiles en bruto con impurezas, como por ejemplo el algodón, el ensartado de elementos extraños. Por lo tanto, la guarnición de cardas se tiene que limpiar menos frecuentemente. En total se ha demostrado que, además de las ventajas esperadas, también mejora la calidad del cardado.

De acuerdo con una realización preferida, el ángulo de addendum es de 90º. Por lo tanto, se deduce que incluso después del reafilado de la guarnición de cardas, hay las mismas proporciones en todos los dientes, lo cual de nuevo conduce a una mejora de la calidad del cardado.

Además, se prefiere particularmente que la longitud de la superficie de la cabeza del diente se corresponda con al menos el 25% del paso entre los dientes.

Además se prefiere que la longitud de la superficie de la cabeza del diente se corresponda con el triple, preferiblemente el quíntuple, de su anchura. Finalmente, se ha demostrado adecuado que la longitud de la superficie de la cabeza del diente sea mayor o igual que la mitad de la altura del diente, medida desde la base del diente hasta la punta del diente. Por ello, se produce una guarnición de cardas relativamente baja, que sorprendentemente conduce a unas buenas proporciones de cardado. En particular, se prefiere que la longitud de la superficie de la cabeza del diente se corresponda con la altura del diente.

También es ventajoso que el dorso del diente que se une con la superficie de la cabeza del diente forme, con la siguiente cara de ataque, un ángulo de entre 20 y 30º, preferiblemente 25º. Este ángulo de abertura entre el dorso del diente y la cara de ataque del diente tiende a ser menor que en las guarniciones de carda de la técnica antecedente; sin embargo, es suficiente para procurar una recogida de las fibras sin problemas por el rodillo colocado en el sentido del funcionamiento.

La guarnición de cardas de acero descrita anteriormente es muy especialmente adecuada para tambores de cardas de algodón, denominadas cardas de alto rendimiento, con una velocidad circunferencial del tambor de más de 1500 m/min, y una guarnición de cardas de acero del tambor con una altura total de menos de 3 mm y una anchura de ala de menos de 0,7 mm. Por lo tanto, para tal carda de algodón con una guarnición de cardas de acero de acuerdo con la invención, se requiere una protección especial.

A continuación se explican con más detalle los ejemplos de realización de la invención mediante un dibujo.

Las figuras muestran:

Fig. 1 en una representación esquemática, una carda en una vista lateral,

Fig. 2 una geometría de los dientes de una guarnición de cardas de acero de acuerdo con una primera realización,

Fig. 3 una vista del corte de la representación de la Fig. 2 por la línea III-III,

Fig. 4 la geometría de una guarnición de cardas de acero de acuerdo con una realización adicional y

Fig. 5 una vista del corte por la línea V-V de la Fig. 4.

La Fig. 1 muestra una representación esquemática de una máquina de cardar con un tambor 1, un rodillo de alimentación 2, un rodillo quebrantador 3 y rodillos descargadores 4. La dirección de giro circunferencial de los rodillos se representa en la Fig. 1 mediante flechas.

La guarnición de cardas que se describe a continuación se refiere a tales rodillos o tambores que recogen activamente las fibras de los rodillos colocados en el sentido del funcionamiento. La representación mostrada en la Fig. 1, el rodillo quebrantador 3, los rodillos descargadores 4 y en particular el tambor 1, son ejemplos de esto.

La Fig. 2 muestra secciones de dientes de sierra de una guarnición de cardas de acero, como se prevé para el tambor mostrado en la Fig. 1. Se trata de unos dientes de sierra con una altura total de 2 mm y un paso entre los dientes, medido desde la punta del diente 5 hasta la siguiente 5', de 1,7 mm. El ángulo de ataque \alpha de la cara de ataque 6 medido respecto a la vertical comprende, en el ejemplo de realización aquí descrito, 40º. A diferencia de las guarniciones de cardas de acero conocidas hasta ahora, la punta del diente no se une inmediatamente con el dorso del diente 7, es más, primero hay una superficie de la cabeza del diente 8. El ángulo de la superficie de la cabeza del diente \beta, de nuevo medido respecto a la vertical, es de 87º en el ejemplo de realización mostrado en la Fig. 2. La longitud L de la superficie de la cabeza del diente es de 0,5 mm, su anchura B (compárese con la Fig. 3) es de 0,07 mm. La altura del diente H, medida desde la base del diente hasta la punta del diente 5 es ligeramente menor de 0,5 mm.

El ángulo \gamma, formado por la cara de ataque 6 y el dorso del diente 7, es de 24º en el ejemplo de realización mostrado en este documento.

En las Figs. 4 y 5 se muestra una variante adicional de los dientes de sierra para una guarnición de cardas de acero de acuerdo con la invención. Para los componentes iguales y similares se emplean las mismas referencias que en el ejemplo de realización anterior.

Al contrario que en el ejemplo de realización anterior, la distancia entre la punta del diente 5 hasta la punta del diente 5' colindante es solamente de 1,5 mm. El ángulo de ataque \alpha es solamente de 30º. El ángulo \gamma formado entre la cara de ataque 6 y el dorso del diente 7 es, en este ejemplo de realización, de 25º.

A continuación se explican con más detalle la forma de actuación y de funcionamiento de los ejemplos de realizaciones que se han descrito anteriormente.

Básicamente, los dos ejemplos de realización no se diferencian. Sin embargo, los dientes de sierra representados en la Fig. 2 presentan un mayor ángulo de ataque, lo que es especialmente adecuado para una recogida de fibras más activa. Sin embargo, es determinante para ambas variantes que, con una altura de diente proporcionalmente baja, se proporciona una superficie de la cabeza del diente larga, que no está inclinada y que por lo tanto atribuye a la punta del diente y a toda la guarnición de cardas una mayor estabilidad. Además de estas ventajas, se tiene que destacar especialmente que la geometría de los dientes prácticamente no se modifica ni siquiera después de un reafilado de la guarnición de cardas, de forma que, por una parte, todos los dientes presentan las mismas proporciones, y por otra parte no se modifica la calidad del cardado ni después del afilado de las guarniciones de cardas.

La colocación de las guarniciones de cardas se produce de forma convencional.

Claims (7)

1. Una carda con una velocidad circunferencial de tambor >1500 m/min y una guarnición de cardas de acero de tambor con una altura total de 3 mm y una anchura de ala de 0,7 mm, donde los dientes presentan un ángulo de ataque (\alpha) mayor o igual a 0º, caracterizado porque los dientes presentan un ángulo de addendum (\beta) que es mayor de 85º, preferiblemente mayor de 87º, donde la longitud (L) de la superficie de la cabeza del diente, que se extiende con este ángulo desde la punta del diente (5) hasta el dorso del diente (7), se corresponde con al menos un 15% de la longitud del paso entre los dientes.

2. La carda de acuerdo con la reivindicación 1, caracterizada porque el ángulo de addendum (\beta) del diente es de 90º.

3. La carda de acuerdo con la reivindicación 1 ó 2, caracterizada porque la longitud (L) de la superficie de la cabeza del diente (8) se corresponde con al menos un cuarto del paso entre los dientes.

4. La carda de acuerdo con una de las reivindicaciones 1 a 3, caracterizada porque la longitud (L) de la superficie de la cabeza del diente (8) se corresponde con al menos el triple, preferiblemente el quíntuple de su anchura (B).

5. La carda de acuerdo con una de las reivindicaciones 1 a 4, caracterizada porque la longitud (L) de la superficie de la cabeza del diente (8) es mayor o igual que la mitad de la altura del diente (H), medida desde la base del diente hasta la punta del diente (5).

6. La carda de acuerdo con una de las reivindicaciones 1 a 5, caracterizada porque el dorso del diente (7) que se une con la superficie de la cabeza del diente (8) forma, con la siguiente cara de ataque (6), un ángulo \gamma de entre 20º y 30º, preferiblemente 25º.

7. La carda de acuerdo con una de las reivindicaciones 1 a 6, caracterizada porque la altura del diente (H) es menor o igual que 0,5 mm.